Romina Power habla por primera vez en años y dice lo que nadie esperaba: “Hemos vuelto”. La artista comparte recuerdos íntimos del día en que se casó con Albano Carrisi y confiesa cómo ese amor —que pareció perdido— sigue vivo en los rincones más profundos de su corazón.
Pocas historias de amor han trascendido generaciones como la de Romina Power y Albano Carrisi.
Su romance fue más que un cuento de hadas: fue una leyenda viviente que marcó la música, la televisión y los corazones de millones de personas en Europa y América Latina.
Juntos cantaron al amor, a la esperanza y a la vida, hasta que la realidad los separó.
Pero ahora, décadas después, Romina Power ha pronunciado dos palabras que nadie esperaba escuchar:
“Hemos vuelto.”
Y con esa frase, el mundo volvió a mirar hacia una de las parejas más icónicas de la historia del espectáculo.

El amor que nació entre notas y miradas
Romina Power y Albano Carrisi se conocieron a finales de los años 60, en una época en la que la música romántica vivía su máximo esplendor.
Ella, hija de los actores estadounidenses Tyrone Power y Linda Christian, llegaba al cine italiano con la inocencia y belleza de una estrella en ascenso.
Él, un joven cantante del sur de Italia, humilde, apasionado y con una voz que enamoraba multitudes.
“Cuando la vi por primera vez, supe que algo en mi vida cambiaría para siempre”, recordó Albano años después.
Su conexión fue inmediata. La química entre ellos traspasaba el escenario y el lente de las cámaras.
No solo compartían canciones: compartían sueños.
El día que unieron sus destinos
La boda entre Romina Power y Albano Carrisi se celebró en 1970 en Cellino San Marco, el pueblo natal de Albano, en el sur de Italia.
Fue una ceremonia sencilla, pero llena de emoción.
“Queríamos que fuera algo íntimo, rodeado de la gente que amábamos”, reveló Romina en su reciente entrevista.
La artista recordó con ternura cada detalle: el olor de las flores, el sonido de las campanas, y la emoción de ver a Albano esperándola al final del pasillo.
“Recuerdo su mirada. Era como si el tiempo se hubiera detenido.
No era solo una boda, era el inicio de una vida compartida, de una aventura que nos uniría para siempre.”
Ese día comenzó una historia que, más allá de los años, los éxitos y las tragedias, nunca se borró del corazón del público.
Una pareja que conquistó el mundo
Después de casarse, Romina y Albano formaron una dupla artística que arrasó en toda Europa y América Latina.
Con canciones como “Felicità”, “Sharazan” o “Ci sarà”, se convirtieron en símbolo del amor eterno y de la armonía perfecta.
El público los veía como la representación de una pareja ideal: talentosos, carismáticos y profundamente enamorados.
Sin embargo, detrás de los aplausos, la vida también les puso pruebas difíciles.
El dolor que los separó
Su matrimonio atravesó momentos de felicidad, pero también de tragedia.
En 1994, su hija Ylenia desapareció misteriosamente en Nueva Orleans, un hecho que marcó para siempre sus vidas.
A partir de ese momento, nada volvió a ser igual.
“Fue un dolor indescriptible. Nos unió el amor, pero el sufrimiento nos rompió el alma”, confesó Romina.
El matrimonio se desmoronó con el tiempo, y la pareja terminó separándose oficialmente en 1999.
Sin embargo, a pesar de la distancia, nunca dejaron de estar conectados por el amor, la música y los recuerdos.
El reencuentro que nadie esperaba
Durante años, los rumores sobre una posible reconciliación fueron constantes, aunque ambos insistían en mantener su relación en el terreno de la amistad y el trabajo.
Hasta que, recientemente, Romina Power sorprendió al mundo con sus declaraciones.
“Hemos vuelto… no al pasado, sino a nosotros mismos.
Con Albano comparto una historia que ningún tiempo ni distancia puede borrar.”
La frase, sencilla pero poderosa, desató una ola de emoción entre los fans.
Miles de mensajes inundaron las redes sociales, celebrando la posibilidad de un reencuentro no solo musical, sino también sentimental.
Detalles inéditos del día de la boda
Por primera vez en años, Romina habló con lujo de detalles sobre su boda con Albano.
Contó que el vestido fue diseñado especialmente para ella por un modisto italiano cercano a la familia Carrisi, y que su madre, Linda Christian, lloró durante toda la ceremonia.
“Recuerdo que mi madre me dijo: ‘Romina, este es el amor que soñé para ti’. Y tenía razón. Fue amor verdadero.”
También recordó un momento curioso: Albano, nervioso, casi deja caer los anillos al suelo antes de colocárselos.
“Nos reímos tanto… ese pequeño accidente hizo que la tensión desapareciera”, recordó entre risas.
Después de la ceremonia, la pareja ofreció una recepción familiar en la casa de los padres de Albano, con música en vivo y comida típica de Puglia.
“Fue una boda sencilla, pero llena de magia. Nunca imaginé que ese día viviría para siempre en la memoria de tanta gente.”
El amor maduro y transformado
Aunque ya no son la pareja romántica que fueron hace medio siglo, Romina admite que el vínculo que los une es más fuerte que nunca.
“No puedo negar que lo sigo amando, pero es un amor diferente. Es el amor que nace del respeto, de la historia y de lo que hemos compartido.”
Por su parte, Albano ha dicho en entrevistas recientes que Romina siempre será parte esencial de su vida:
“Con ella viví mis años más felices. Nadie podrá borrar lo que fuimos.”
Ambos siguen compartiendo escenario en conciertos especiales donde interpretan sus grandes éxitos, generando ovaciones de pie y lágrimas entre los asistentes.
La confesión que emocionó a todos
Durante su reciente aparición en televisión, Romina fue directa al corazón:
“Nos hemos perdonado mutuamente.
Hemos vuelto a hablar con el alma.
Ya no importa lo que pasó, solo lo que queda: una historia eterna.”
Sus palabras hicieron que el público estallara en aplausos.
Muchos interpretaron esta confesión como una segunda oportunidad para ambos, aunque Romina aclaró que más allá del amor romántico, lo importante es el lazo espiritual que los une.
“No sé si la vida nos juntará otra vez como pareja, pero en el alma nunca nos separamos.”
El legado de una historia eterna
Más allá de los rumores, lo cierto es que Romina Power y Albano Carrisi representan algo más grande que una simple relación amorosa.
Representan la esperanza en los amores que trascienden el tiempo, aquellos que sobreviven a la distancia, al dolor y a la vida misma.
Hoy, ambos viven en paz, agradecidos con el público que los acompañó en cada etapa.
Y aunque cada uno ha seguido su camino, su historia sigue siendo una de las más hermosas jamás contadas en la música.
“El amor cambia, pero no muere.
A veces se transforma en canción… y esa canción nunca se apaga.”
Epílogo: el amor como melodía infinita
Romina Power y Albano Carrisi no necesitan confirmaciones ni etiquetas.
Su historia, marcada por la pasión, el arte y la pérdida, ya pertenece al corazón del público.
Y si hoy Romina dice “hemos vuelto”, quizás no habla de un regreso físico, sino de algo mucho más profundo:
del reencuentro con su pasado, con su verdad, con el amor que siempre la inspiró.
Porque, como ella misma concluyó en la entrevista:
“Cuando una historia nace del alma, nunca termina.
Y la nuestra… seguirá cantándose por generaciones.”