Lo sacaron sin piedad: Krayg Peña rompe el silencio y apunta directo a Mario Hart como el cerebro ocult
El nombre de Krayg Peña resonó con fuerza durante varios años en la televisión peruana.
Su acento extranjero, su sonrisa encantadora y su presencia física imponente lo convirtieron rápidamente en una figura clave del programa “Combate”.
Pero más allá del show, su historia se volvió cada vez más compleja, marcada por una relación con Korina Rivadeneira, choques con figuras del espectáculo… y una expulsión migratoria que, hasta hoy, huele a algo más que simple burocracia.
Todo empezó cuando su romance con Korina se volvió el centro de atención.
Eran la pareja explosiva del momento: él, el modelo venezolano; ella, la sensual y mediática figura que más tarde se casaría con Mario Hart.
Y aquí es donde el relato comienza a oscurecerse.
No solo del corazón, sino legales.
Migraciones comenzó a observar con lupa el estatus migratorio de Krayg.
Y cuando muchos pensaban que era una simple revisión de rutina, llegó la bomba: el Estado peruano decidió expulsarlo.
Lo sacaron del país.Sin más.
En un vuelo rápido, como si se tratara de una ficha incómoda en un tablero que ya había sido repartido.
Pero la pregunta que nunca se fue es: ¿por qué él sí y Korina no? Ambos venezolanos, ambos en situación similar.
Sin embargo, mientras ella encontraba una salida legal al casarse con Mario Hart, él era prácticamente echado por la puerta de atrás.
Y ahí, en esa grieta de incongruencia, comenzaron los rumores más oscuros.
Según fuentes cercanas al entorno de Krayg, la relación entre él y Mario Hart nunca fue cordial.
Detrás de las cámaras se hablaba de tensiones constantes, de miradas cruzadas e incluso de incidentes que la producción decidió nunca sacar a la luz.
Cuando Korina cambió de pareja, muchos lo vieron como un paso natural.
Pero para Krayg, aquello fue un corte abrupto, casi quirúrgico.
Y tras su salida del país, comenzó a decirlo sin pelos en la lengua: “Yo no me fui.
A mí me sacaron”.
¿Fue Mario Hart una pieza clave en ese proceso? Nunca se confirmó oficialmente.
Pero lo cierto es que durante los días más intensos del escándalo, varios testigos aseguraron haber visto a Mario reunido con representantes legales y asesores, supuestamente para proteger a Korina de un proceso similar.
Lo que encendió la teoría de que pudo haber usado su influencia para asegurar el camino de ella… y cerrar el de Krayg.
El propio Krayg Peña no ha sido tímido en señalar que su expulsión fue “injusta, arbitraria y sospechosamente selectiva”.
Desde fuera del país, lanzó mensajes en redes donde dejaba entrever que alguien había movido fichas para sacarlo del juego.
“Hay personas que prefieren borrar lo que les incomoda, aunque hayan compartido el mismo techo”, escribió una vez, sin mencionar nombres, pero con todas las pistas necesarias para que los seguidores conectaran los puntos.
Después de su expulsión, Krayg se mantuvo alejado de los medios por un tiempo.
Volvió a Venezuela por un corto periodo, pero pronto se radicó en otro país sudamericano, donde retomó su carrera como modelo y entrenador personal.
Hoy lleva una vida más privada, pero cada tanto lanza frases que reavivan la llama del escándalo: “Lo más triste no fue irme del Perú.
Lo más triste fue descubrir quién me empujó a hacerlo”.
¿Acaso Mario Hart realmente intervino para proteger a su pareja actual y dejar en la sombra al ex incómodo? ¿O fue solo una coincidencia dentro del caos migratorio que afectó a miles de venezolanos durante ese periodo?
La historia de Krayg Peña no terminó cuando salió del Perú.
Al contrario, se convirtió en una herida abierta en el espectáculo nacional.
Una historia de amores rotos, influencias sospechosas y una expulsión que todavía no encuentra una explicación convincente.
Lo que está claro es que en el mundo del espectáculo, los enemigos no siempre se enfrentan en el escenario.
A veces, solo hay que mirar quién se queda…y quién desaparece sin dejar rastro.